¿Es bueno hacer ejercicio mientras estás enfermo?

Fernanda y Verónica Molina | Nutriólogas | Ced. Prof 5885372 & 678462 | Mérida

 Hacer ejercicio regularmente es una excelente manera de mantener tu cuerpo sano, disminuye el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes y enfermedades cardíacas y refuerza el sistema inmunológico.

A pesar de ello, muchas personas se preguntan si hacer ejercicio mientras se está enfermo como una gripe ayudará o empeorará la recuperación. 

Muchos expertos utilizan la regla "por encima del cuello” según esta teoría, si sólo estás experimentando síntomas que están por encima de su cuello, tales como congestión nasal, estornudos o dolor de oído, ya estás listo para continuar haciendo ejercicio.

Por otra parte, experimentas síntomas debajo del cuello, como náusea, dolores del cuerpo, fiebre, diarrea, tos con flema, lo mejor es dejar de hacer ejercicio hasta sentirse mejor.

¿Cuándo es seguro hacer ejercicio?

Por lo general, se considera seguro realizar ejercicio con los siguientes síntomas, pero siempre consulta con tu médico antes.

• Resfriado leve 
  Cuando tienes una infección viral de la nariz y la garganta. 
  Aunque los síntomas varían de persona a persona, la mayoría de las personas que tienen una congestión nasal, dolor de cabeza, estornudos y tos leve. 
  Si tienes un resfriado leve, no hay necesidad dejar de hacer ejercicio. Aunque, si sientes que te falta energía, considera reducir la intensidad de tu entrenamiento o acortar su duración. 
  Ten en cuenta que puedes propagar gérmenes a otras personas y causar que se enferman. Practica una higiene adecuada, lávate las manos con frecuencia y tapate la boca al estornudar o toser.
• Dolor de oído 

El dolor de oído en adultos es más comúnmente causado por dolor de garganta. Hacer ejercicio con dolor de oído se considera seguro, mientras el sentido del equilibrio no esté afectado y se descarte una posible infección.

Si la congestión nasal está asociada a fiebre u otros síntomas como una tos con flema debes de evitar hacer ejercicio. Sin embargo, si solamente es una congestión nasal no hay ningún problema, de hecho, un poco de ejercicio puede ayudar a abrir los conductos nasales, ayudándote a respirar mejor.

Un dolor de garganta generalmente es causado por una infección viral como el resfriado común o gripe. En ciertas situaciones, cuando el dolor de garganta está asociado con fiebre, tos con flema o dificultad para tragar, debes evitar hacer ejercicio.  

Sin embargo, si estás experimentando un leve dolor de garganta causado por resfriado común o alergias, no hay problema.  Hidratarse con agua fría ayuda a aliviar el dolor de garganta durante la actividad física.

¿Cuándo no se recomienda hacer ejercicio?

Si bien el ejercicio es generalmente inofensivo cuando tienes un resfriado leve o dolor de oído, no se recomienda cuando se presentan los siguientes síntomas:

• Fiebre.
• Tos con flema
• Influenza

¿Cuándo es correcto volver al ejercicio?

Muchas personas quieren regresar enseguida después de recuperarse de una enfermedad.  El ejercicio regular puede reducir el riesgo de enfermarse ya que refuerza el sistema inmunológico.

Algunas personas se preocupan de que los días de reposo les va a causar una pérdida de masa muscular y fuerza. Muchos estudios muestran que, para la mayoría de las personas, la pérdida de músculo comienza después de aproximadamente tres semanas de no hacer ejercicio, mientras que la fuerza comienza a declinar alrededor de los 10 días.

Aunque volver al ejercicio después de una enfermedad es beneficioso para la salud en general, es importante escuchar a tu cuerpo y a tu médico para decidir si retomas una actividad física más intensa.

L.N. Verónica y M.S.C L.N Fernanda Molina 

Licenciadas en Nutrición Nutrición para control de peso en todas las etapas de la vida.

Nutrición Deportiva | Nutrición y Educación en Diabetes

Maestría en Ciencias en Nutrición Clínica Nutrición Clínica y Salud Pública (University College of London)  

Cédulas profesionales: 5885372 / 678462  

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